¿Cómo es una cirugía veterinaria? Paso a paso en una intervención quirúrgica
Si tu perro o gato necesita una cirugía, es normal que sientas cierta preocupación. Conocer el proceso puede ayudarte a estar más tranquilo y a colaborar mejor con el equipo veterinario. En este artículo te explicamos cómo se desarrolla una intervención quirúrgica en una clínica veterinaria y qué puedes esperar en cada etapa.
Antes de la cirugía: ingreso y preparación
Tu mascota ingresará en la clínica unas horas antes de la operación o incluso el día anterior si es necesario realizar pruebas previas. Durante este tiempo, el equipo veterinario hará una evaluación completa que puede incluir una exploración física, análisis de sangre y valoración anestésica.
También le colocarán una vía intravenosa para administrar medicamentos y líquidos, y rasurarán la zona donde se realizará la intervención para garantizar la máxima higiene. Es importante que tu mascota llegue en ayunas, salvo que el veterinario indique lo contrario.
Durante la cirugía: el equipo que cuida de tu mascota
En quirófano, tu mascota estará en manos de un equipo veterinario especializado:
El cirujano es quien realiza la intervención, utilizando técnicas adaptadas a la especie y al problema a tratar. En cirugías ortopédicas, como fracturas o roturas de ligamento, se pueden utilizar implantes veterinarios específicos como los de BETA Implants.
El anestesista se encarga de aplicar la anestesia y monitorizar constantemente a tu mascota para asegurar que esté estable y sin dolor durante todo el procedimiento.
El auxiliar o enfermero veterinario apoya al cirujano, gestiona el instrumental, cuida de la esterilidad del entorno y participa en el proceso de recuperación.
La intervención se realiza con equipamiento especializado que permite vigilar cada parámetro vital y garantizar la seguridad del procedimiento.
Después de la cirugía: recuperación bajo control
Tras la operación, tu mascota pasará a la zona de recuperación. Allí estará controlada de forma continua hasta que despierte por completo. El equipo veterinario evaluará su evolución y le administrará la medicación necesaria para asegurar un despertar tranquilo y sin dolor.
Dependiendo del tipo de cirugía y de cómo responda tu mascota, podrá volver a casa ese mismo día o quedarse ingresada una noche para observación.
El alta y los cuidados en casa
Cuando tu veterinario te indique que puedes llevar a tu mascota a casa, te dará instrucciones detalladas sobre los cuidados postoperatorios. Entre ellos se incluyen:
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Seguir el tratamiento con analgésicos y antiinflamatorios tal como te lo indiquen
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Evitar que salte, corra o suba escaleras durante las primeras semanas
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Vigilar la herida quirúrgica y evitar que se lama los puntos (puede ser necesario un collar isabelino)
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Acudir a las revisiones programadas
Tu colaboración en casa es esencial para que la recuperación sea un éxito. Si notas algo inusual o tienes dudas, contacta siempre con tu veterinario.
Una cirugía planificada y segura
Aunque pueda imponerte al principio, la cirugía veterinaria es un procedimiento seguro y bien controlado. Cada profesional del equipo cumple una función concreta para cuidar a tu mascota antes, durante y después de la intervención.
En BETA Implants colaboramos con clínicas veterinarias aportando implantes diseñados específicamente para cada caso, lo que ayuda a mejorar los resultados quirúrgicos y la recuperación.
Si estás acompañando a tu perro o gato en un proceso quirúrgico, confía en tu veterinario de confianza, plantea todas tus preguntas y sigue sus recomendaciones.
Y si eres veterinario y necesitas apoyo técnico para un caso ortopédico, en BETA Implants estamos a tu disposición para ayudarte a encontrar la mejor solución.